Ir al contenido principal

“Mandar es gobernar mal” por Miguel Aguado

Publicado en la web de la Cadena Ser -Norte

OpiniónSER comunidad, Madrid opina en red
13/04/2011 a las 10:57

Fotos
foto 1 de 1
“Mandar es gobernar mal” por Miguel Aguado
“Mandar es gobernar mal” por Miguel Aguado
Nuestra vida se está volviendo horizontal. Los viejos valores verticales de jerarquía, obediencia y monolitismo cada vez pintan menos en nuestro día a día, y más bien apostamos por valores horizontales de intercambio, igualdad, participación y diversidad. La dictadura es vertical, la democracia horizontal. El ‘ordeno y mando’ es vertical, el diálogo es horizontal. La exigencia es vertical, la seducción horizontal. En nuestro trabajo, en nuestra familia, en nuestro entorno todos tendemos a ser cada vez más horizontales: nos mandan menos y mandamos menos, pero en cambio cooperamos más, sugerimos y nos sugieren más, convencemos y nos convencen más. En fin, nuestra sociedad se relaciona mejor y es más sensible al argumento y la persuasión que nunca. En política, casi todos los partidos españoles han ido cambiando en paralelo a esa evolución. Alguno queda, que no señalaré en mi compromiso de no atacar en esta columna, que aún no lo ha hecho, y sigue aferrado a la imposición, la falta de diálogo y el ‘porque lo digo yo’ como señas de identidad. Algunos todavía reclaman mano dura, intransigencia y rigidez para abordar los problemas. Ese autoritarismo antiguo no tiene futuro.
Todos sabemos que el mundo es redondo, pero hay quien disiente. El analista estadounidense Thomas Friedman publicó en 2005 su influyente ensayo “El mundo es plano: una breve historia del siglo XXI”, en el que defendía que internet, la globalización económica y demás conmociones contemporáneas han vuelto plano el mundo, en el sentido de que las empresas, las sociedades y las personas de nuestro planeta tienden a nivelarse, interactuar y competir entre sí en un plano de cada vez mayor igualdad.
Yo no estoy tan seguro del alcance de esa ‘democratización económica global’ que ve Friedman, pero suscribo la idea de que nuestra sociedad occidental es cada vez más democrática. Más abierta al razonamiento, más dinámica, más pragmática, más sensible a los matices, más propensa al intercambio fructífero de pareceres, más dispuesta a escuchar a los demás. Hemos dejado atrás el ‘usted no sabe con quién está hablando’. La noción de respeto sigue vigente, pero ahora el respeto se gana, no viene dado por la posición de cada uno. Las esposas ya no preparan a los maridos la bata y las zapatillas, los hijos ya no tratan de usted a sus padres ni les deben sumisión, los jefes delegan e involucran a sus colaboradores en proyectos abiertos, las empresas procuran canalizar la creatividad y participación de sus empleados. Incluso estructuras que podrían a veces parecer más burocratizadas como las iglesias, los partidos (casi todos) y los sindicatos intentan abrirse al debate y buscan estructurarse de manera flexible y, si no horizontal, sí al menos bidireccional entre la cúpula y el resto de la organización.
En nuestro país sigue habiendo personas y grupos, que se mantienen anclados en una actitud hosca, anacrónica y antipática de todos-firmes-que-aquí-mando-yo que les aleja de la realidad, les enajena la voluntad participativa de los ciudadanos, les priva del imprescindible contraste con otras opiniones y, no por casualidad, les tiene sumido en una feroz crisis-guerra interna que promete durar años. El PSOE funciona porque articula la disensión de manera positiva y debate consigo mismo y con los demás. Se mueve en torno a ideas (la de solidaridad, la de desarrollo sostenible, la de igualdad, etc.) y promueve la transparencia y la democracia interna; otros se mueven en torno a personas como delegados de oscuros grupos de poder y fomenta el monolitismo, la adhesión, la obediencia. Hoy y cada vez más gobernar es liderar a la sociedad, estimularla y dotarla de capacidad para que progrese; para los conservadores gobernar es mandar y punto.
Los romanos distinguían entre dos clases de poder. Según ellos, una cosa es la ‘potestas’, que tiene el sentido del poder efectivo, sea cual sea su legitimidad o su origen, y otra cosa distinta y más digna es la ‘auctoritas’, que es el poder derivado de un verdadero liderazgo, inspirador, legítimo, respetado por todos y fruto de una autoridad o prestigio consecuencia del buen hacer. Podríamos decir que la potestas vence, pero la auctoritas convence. La potestas es vertical, el poder por el poder, en tanto que la auctoritas es horizontal, el poder para liderar e inspirar el progreso social. Todos estamos de acuerdo en que es la auctoritas la forma más deseable de poder, pero queda en cierta derecha española algún resabio inquietante de cuando lo importante era ejercer el poder se tuviera legitimidad para ello o no, resabio que explica aquel dicho cruel de que ‘la izquierda tiene principios, la derecha tiene intereses’.
Miguel Aguado, secretario de Medio Ambiente del PSM


Comentarios

  1. Me gusta la idea de horizontalidad, pero en este mundo con los desniveles económicos que tenemos la horizontalidad creo que es ficticia. ¿Hay relación horizontal entre naciones pobres y ricas? ¿Hay una relación de horizontalidad entre políticos que fijan sus sueldos y sus jubilaciones y los ciudadanos que se les imponen sueldos y condiciones de jubilación?

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

¿Qué tienen en común Einstein, Newton, DaVinci, Tesla y Edison?

RESPUESTA: EL VEGETARIANISMO. Eminentes científicos e inventores a favor del vegetarianismo Con el fin de ayudar a preservar los recursos naturales de nuestro planeta, muchos de los más grandes pensadores del mundo y científicos a través de la historia, han observado una dieta vegetariana y han afirmado la necesidad de ésta desde el punto de vista tanto moral como lógico.  Por ejemplo, Sir Isaac Newton, “el padre de la física”, y Leonardo Da Vinci, un científico de medio tiempo, quien hizo importantes descubrimientos en hidráulica, óptica y mecánica, fueron ambos vegetarianos. De hecho, Da Vinci era tan ferviente acerca del vegetarianismo que compraba pollos enjaulados y los liberaba. Además, Srinivasa Ramanujan (1887-1920), considerado el más grande matemático de los últimos 1000 años, también era vegetariano.                                             Otro entusiasta vegetariano, el gran inventor, físico e ingeniero Nikola Tesla (1856-1943), qui

MEDITACIÓN vs. ENFERMEDAD

  Millones de personas advierten que la meditación es una herramienta accesible y diseñada para mitigar la espesura mental y vivir de forma más ligera –y por lo tanto grata. Sin embargo múltiples estudios recientes, entre ellos uno de la Universidad de Ciencias de la Salud de Georgia, sugieren que los beneficios de la meditación se extienden más allá del reino emocional o psicoespiritual y que puede ser uno de nuestros grandes aliados en cuestiones de salud física.  Dicho estudio consistió en entrenar en meditación trascendental a 62 adolescentes con problemas de hipertensión e instruirlos a practicar dos veces al día, por períodos de 15 minutos. En contraste, a otro grupo se le proporcionó muy poca información y estrategias para disminuir el ritmo de su presión arterial y el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Los resultados mostraron una reducción significativa de la masa ventricular izquierda en los pacientes que practicaron meditación, haciendo que el corazón pudiera bo

Albert Einstein y el budismo

Albert Einstein dijo en cierta ocasión que, a su juicio, el budismo era la única religión compatible con la ciencia. El budismo es una religión con actitud científica, a pesar de que muchos budistas puedan no tenerla. El Buda no es un Dios, sino un sabio, un Einstein de lo espiritual que vivió hace 2500 años. Mediante la reflexión y la meditación, descubrió verdades importantes, leyes del mundo interior, de la misma manera que los físicos han descubierto algunas del mundo exterior, las leyes de la física. Eminentemente práctico, el Buda no se entretenía en discusiones teóricas acerca de la existencia o inexistencia de un Dios personal, sino que ofreció una solución para el sufrimiento humano, que había nacido de su propia comprensión de la naturaleza de la realidad. Sentado bajo un árbol, el árbol del bodhi, alcanzó la iluminación, comprendió la naturaleza vacía de los fenómenos, entendió la raíz del sufrimiento y se decidió a compartir con sus semejantes lo que había descubierto.