Publicado en EL CONFIDENCIAL.COM Los nuevos materiales están de moda. No sólo por una cuestión mediática: también porque los viejos, tarde o temprano, terminarán por extinguirse, entre otros motivos por las nuevas exigencias de la producción tecnológica, tanto económicas como prácticas. Por eso los laboratorios de medio mundo echan humo tratando de encontrarlos. Un nuevo material con propiedades valiosas y con posibilidades de ser producido en grandes cantidades y a un precio competitivo cambiaría el mundo. El lugar donde buscan los científicos los nuevos materiales no está en la superficie, sino en niveles nanométricos . Ha habido muchos en los últimos años: los nanotubos de carbono, el fluoreno, las nanoestructuras basadas en puntos cuánticos… Pero es el grafeno la estrella indiscutible de este baile. Sus características y posibles aplicaciones, fuera de toda duda en la literatura científica, han resistido con firmeza los ataques del viejo mundo. En el ca...