Afortunadamente hay gente en el mundo que se preocupa por los animales y está dispuesta a arriesgar su vida por ellos, esto es lo que ocurrió en Kenya, donde un pequeño elefante había caído a una fosa y su madre, nerviosa, no conseguía sacarlo.
El equipo de ATE, Amboseli Trust for Elephants, llegó a la zona arriesgando su vida, enfrentándose a la enfurecida madre y llevándola lejos del lugar para proceder al rescate del bebé, todo salió a la perfección y momentos más tarde se vivió un reencuentro emotivo entre la madre y su cría.
Maravilloso y emocionante Miguel Angel, gracias por hacercarnos estas realidades. Un abrazo
ResponderEliminarDe nada Fernando, es un placer. Siempre hay que tratar de reflejar el lado positivo de la vida, las cosas que hace la buena gente (que son mayoría), provocar una sonrisa de felicidad e incluso de humor.
ResponderEliminarGracias